Dos soldados del Ejército Mexicano Fueron retenidos hoy por simpatizantes de la asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) que participaban en la barricada instalada en el crucero de 5 Señores, por hacer supuestamente labores de inteligencia en Ciudad Universitaria, para un eventual operativo. Según los participantes, los efectivos castrenses, uno de ellos con grado de teniente de Infantería, “caminaban en forma sospechosa” alrededor de las 11:30 horas por la avenida Ferrocarril “y haciendo preguntas a la gente” sobre quien había puesto los parapetos. “Se les hizo frente, se les interrogó y al registrarlos, se encontraron sus identificaciones como militares y libretas con anotaciones sobre el movimiento”, Señalaron.
El teniente de nombre Lázaro Miranda Flores, quien de acuerdo con los simpatizantes de la APPO se dijo ser miembro de las fuerzas especiales del Ejército Mexicano, tenía entre sus ropas una credencial de identificación de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), donde se autoriza la portación de una pistola nueve milímetros Taurus, matrícula L27549. El oficial, conforme a los testimonios, pertenece a un grupo especial de información de la 28ava. Zona Militar con sede en la agencia municipal Santa María Ixcotel, perteneciente al municipio de Santa Lucia del Camino.
El otro retenido, Pedro Olivera Reyes, según su licencia de conducir expedida por la Dirección de Tránsito del Estado, está domiciliado en el 99 Batallón de Infantería, establecido en el campo militar de Santa María Ixcotel. Conforme a las versiones, Olivera Reyes, quien guiaba a su superior, al ser interrogado, “hablaba con mucha desconfianza y miedo delante del teniente por que seguramente estaban haciendo trabajos encubiertos”. Los militares, fueron vendados de los ojos y subidos al autobús número B-068 de la empresa Transporte Urbanos y Suburbanos Guelatao (Tusug), que está siendo utilizado en la barricada, para ser resguardados. Dos horas después, los simpatizantes de la APPO entregaron a los soldados en una ambulancia de la Cruz Roja, quienes certificaron que no fueron golpeados, en presencia del Mayor de Infantería, Jesús Salazar, quien partió con ellos en el mismo vehículo.
Fuente: Octavio Vélez, NOTICIAS 3A.