A las 12:40 de ayer una caravana de simpatizantes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) compuesta por 36 vehículos (17 autobuses y 19 automóviles particulares) salió del Hemiciclo a Juárez rumbo a la capital de Oaxaca para romper «el cerco informativo» y participar este domingo en la clausura del congreso constitutivo de la agrupación. «La Policía Federal Preventiva y el gobierno federal han tenido una gran virtud: unieron al pueblo de México», aseveró el secretario general del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana.
Agregó que el próximo fin de semana se constituirá la Asamblea Popular de los Pueblos de México. El contingente compuesto por diversas organizaciones sociales, sindicales, estudiantiles y no gubernamentales fue despedido por una valla humana que, al grito de «¡ni un paso atrás!», se solidarizó con los participantes de la caravana, la cual fue encabezada por los 21 miembros de la asamblea popular que realizaron durante 22 días una huelga de hambre en el Hemiciclo a Juárez. Uno de ellos, Ramiro Zaragoza, manifestó que «la caravana representa que hoy la APPO está más viva que nunca», y añadió que ningún familiar de los huelguistas acudirá a recibirlos «por medida de seguridad».
Fernando Lorenzo Estada, vocero de la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación, aseguró que esta caravana «no va a ir a desalojar el zócalo de Oaxaca ni a enfrentar a la policía, porque somos un movimiento pacífico. Lo que queremos es manifestar nuestra inconformidad con la ocupación militar y de la policía federal, y constatar lo que está ocurriendo allí para que la ciudadanía lo conozca. Porque no siempre los medios de comunicación pueden acceder a cierta realidad». Agregó que si el miércoles el gobernador Ulises Ruiz ofrece su informe de gobierno convocarán a una gran movilización popular. «¿Qué va a informar, si tenemos medio año sin gobierno?», cuestionó.
La caravana, indicó vía telefónica el coordinador general de la misma, Horacio Gómez, avanzó a velocidad lenta debido a la densidad del tráfico y magnitud del contingente, pero sin ningún contratiempo. Por el camino recibieron muestras de apoyo y solidaridad de la gente, expresados por medio de saludos, carteles y ruido de bocinas, y en la parada de Puebla algunas personas les regalaron cobijas y frutas, abundó. A las 17: 30 horas la «caravana de caravanas» dejó la ciudad de Puebla; a ella se sumaron simpatizantes provenientes de Durango, Zacatecas, Jalisco, Michoacán, Morelos, Hidalgo, San Luis Potosí y Aguascalientes, entre otros estados.
En total fueron 22 autobuses y 56 vehículos particulares. Los automotores salieron de la ciudad de México con sus tanques de combustible completamente llenos, para «evitar represalias del gobernador Mario Marín, ya que en la anterior ocasión las gasolineras tenían órdenes de no surtirnos. En esta ocasión no se nos impidió el paso en las casetas, ni nos encontramos con ningún provocador», aseguró Gómez llegando a la segunda parada en Tehuacán.
Fuente: Mariana Norandi, La Jornada en Internet,
http://www.jornada.unam.mx/2006/11/12/index.php?section=politica&article=005n2pol 11/01/2012