Agentes del Secretaría de Seguridad Pública federal armados con fusiles automáticos AR-15 impedían desde esta mañana el acceso a la carretera que conduce al centro de readaptación social El Rincón, donde se encuentran desde el lunes en la mañana 141 personas acusadas de pertenecer a la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO). «Están incomunicados y creemos que los están torturando», coincidieron en denunciar Jesús Juárez Cortés, del Foro de Abogados de Nayarit, y Andrés del Campo, de la Red Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos.
Este último informó que el martes representantes de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) pudieron entrevistarse con 17 de los detenidos y dijeron que todos ellos están severamente golpeados, «aunque ninguno requiere hospitalización urgente, lo que no nos tranquiliza, porque hace unos días en Oaxaca dijeron lo mismo de dos compañeros que estaban recluidos y cuando los revisamos resultó que tenían perforaciones en los pulmones». Después de dos días de no saber nada acerca de los detenidos, esta noche llegaron al penal de El Rincón familiares de éstos, procedentes de la ciudad de Oaxaca, a bordo de cinco autobuses, pero al cierre de esta edición tampoco habían logrado acercarse al recinto carcelario.
Facilidades a familiares
Por su parte, el gobernador de Nayarit, Ney González, aseguró esta mañana en rueda de prensa que su administración dará «todas las facilidades para los familiares de los reos (sic)», en respuesta a las insistentes y frenéticas manifestaciones que desde el martes han hecho representantes de todos los sectores de la iniciativa privada local, para los cuales la presencia de «los oaxaqueños» es catastrófica, porque «generará protestas sociales, de gente que vendrá de otros estados del país a pedir su liberación, y esto desalentará las inversiones productivas en el estado», como dijo el presidente de la representación local del Consejo Coordinador Empresarial, José Bernal Valenzuela.
Haciéndose eco de las preocupaciones de los hombres de negocios, Ney González dijo que esta mañana se comunicó por teléfono con el próximo secretario de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña, para reiterarle que «el gobierno de Nayarit está muy molesto por la falta de respeto que mostró el gobierno federal al mandarnos estos reos sin habernos tomado en cuenta». González añadió que el traslado de los detenidos «fue insensato», porque «cuando se combate un cáncer hay que encapsularlo, no desparramarlo por todo el país», como según él hizo la agonizante administración de Vicente Fox Quesada al enviar aquí a los presuntos integrantes de la APPO.
Rinden declaración
Al cierre de esta edición, el abogado Jesús Juárez Cortés dio a conocer que, de acuerdo con una fuente del interior del penal de El Rincón, los detenidos oaxaqueños están rindiendo declaración ante los tres juzgados penales que hay alrededor del presidio, pero que ninguno todavía ha podido hablar con sus familiares ni con los representantes de las instancias defensoras de los derechos humanos. Andrés del Campo, a su vez, señaló que «existe gran inquietud por el estado de las 34 mujeres detenidas, porque en el momento que la Policía Federal Preventiva se las llevó en Oaxaca a muchas les arrancaron gran parte de sus ropas y después de lo que sabemos que sucedió con las mujeres de Atenco, ahora sólo podemos esperar que a ellas no les haya pasado lo mismo, pero es fundamental que podamos verlas».
Durante los enfrentamientos que se registraron el sábado pasado en el centro histórico de Oaxaca, donde según numerosos testimonios los elementos de la Policía Federal Preventiva (PFP) arrojaron canicas y piedras contra una manifestación pacifica de la APPO, desencadenando así los disturbios, 141 personas (34 mujeres y 107 hombres) fueron arrestadas en la vía pública y llevadas a los penales de Tlacolula y Miahuatlán, al mismo tiempo que 35 más eran declaradas desaparecidas. De manera repentina, el pasado lunes a las 5 de la mañana fueron obligadas a abordar helicópteros de la PFP y horas después aterrizaron aquí en el penal de El Rincón. Ayer, alrededor del mediodía, estudiantes de escuelas particulares y líderes empresariales acudieron a manifestarse a la afueras del centro penitenciario para exigir que «los oaxaqueños se regresen a Oaxaca», porque como dijo el empresario Polo García, «Nayarit no puede ser el drenaje de todos los desperdicios de México».
Fuente: Jaime Avilés, La Jornada en Internet,
http://www.jornada.unam.mx/2006/11/30/index.php?section=politica&article=016n1pol 17/01/2012