Esta vez no hubo reunión urgente; Fox y Abascal estaban en Guanajuato en una fiesta de despedida.
El enfrentamiento de ayer entre elementos de la Policía Federal Preventiva (PFP) e integrantes y simpatizantes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) no fue considerado de tal gravedad como para convocar a una reunión urgente del gabinete de seguridad pública. El secretario de Gobernación, Carlos Abascal Carranza, viajó ayer a Guanajuato para asistir a una comida convocada por el presidente Vicente Fox con diversos integrantes de su gabinete, y hasta anoche no se había girado ninguna instrucción para encuentros urgentes en la residencia oficial de Los Pinos o en Gobernación, como ocurrió a finales del mes pasado, tras una serie de hechos violentos en la capital oaxaqueña. Los responsables de la negociación con la APPO tampoco tenían instrucciones especiales, y por Gobernación sólo se hallaba en Oaxaca Francisco Yáñez Centeno, quien ha fungido como enlace permanente con las organizaciones sociales.
Fuente: Fabiola Martínez, La Jornada en Internet,
http://www.jornada.unam.mx/2006/11/26/index.php?section=politica&article=003n3pol 16/01/2012
Ulises Ruiz, culpable de la agresión, denuncia la APPO. Provocadores del gobierno estatal, responsables del ataque a los policías, acusan.
Tras el enfrentamiento entre la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) y la Policía Federal Preventiva (PFP) ayer, en la capital del estado, después de una marcha, integrantes del movimiento oaxaqueño que permanecen en plantón desde hace varios meses en el Distrito Federal hicieron un llamado a diversas organizaciones nacionales e internacionales a manifestar su repudio ante «la nueva agresión de la PFP a la marcha pacífica». Antonio García Sánchez, coordinador del plantón en la ciudad de México, dijo que se convocó a las organizaciones solidarias al movimiento a una reunión que se realizará hoy afuera de la Cámara de Senadores, para discutir las acciones que se emprenderán desde distintos puntos del país luego del enfrentamiento. Asimismo, dijo que las formas de protesta se incrementarán y serán «más contundentes», pues aunque durante el encuentro nacional de la APPO con organizaciones sociales realizado el pasado 17 de noviembre los asistentes dieron hasta ayer como plazo al gobernador Ulises Ruiz para que presentara su renuncia, lo cual no sucedió. «Esto quiere decir que la estructura del gobierno federal y la priísta lo siguen sosteniendo, pero la APPO seguirá en resistencia, ahora a escala nacional, pues el Frente Amplio Progresista y la convención nacional democrática se comprometieron a brindarnos ese apoyo», dijo García. En protesta por el enfrentamiento ocurrido ayer en la capital del estado, decenas de personas simpatizantes del movimiento en el DF bloquearon por espacio de una hora el Eje Central, a la altura de la calle de Tacuba, cerca de donde permanece el plantón. García culpó a Ruiz Ortiz de «las agresiones» de ayer en Oaxaca, porque «la APPO ha demostrado ser un movimiento pacífico», y subrayó que fueron provocadores enviados por el gobierno del estado quienes agredieron a la PFP. «La APPO se deslinda de cualquier agresión, somos pacíficos y se demuestra porque los 400 heridos que ha habido desde que comenzó el conflicto, sin contar los de hoy (ayer), son nuestros; los más de 300 detenidos también, de los cuales 57 aún permanecen en prisión; son parte del movimiento los 63 desaparecidos y los 17 muertos», acotó. El coordinador del plantón en el Distrito Federal solicitó a las organizaciones sociales, de derechos humanos, políticas, académicas y culturales que se pronuncien contra lo que sucedió ayer en Oaxaca, por la «urgente» salida del mandatario estatal y por el retiro de la PFP de la capital del estado. Por la mañana, integrantes de la APPO y organizaciones simpatizantes con el movimiento bloquearon por espacio de dos horas las casetas de peaje de las autopistas México-Cuernavaca y México-Puebla, donde permitieron el libre paso de los vehículos, sin que se les cobrara cuota. Integrantes de la comisión de difusión de la APPO aseguraron que los bloqueos fueron parte de las acciones de apoyo a la marcha de ayer en la capital de Oaxaca; además de que debido a que Ulises Ruiz «se aferra» al gobierno de la entidad, la APPO realizará más acciones en diversas ciudades del país. La toma de la caseta de la México-Cuernavaca comenzó alrededor de las 8 de la mañana, cuando decenas de simpatizantes de la APPO solicitaron a los trabajadores se apartaran de sus puestos; el retiro se dio dos horas después. En la autopista México-Puebla se realizó una acción similar a las 10 de la mañana, donde después de bloquear la caseta por espacio de dos horas, los contingentes marcharon sobre la calzada Ignacio Zaragoza. En estos bloqueos participaron, además de los integrantes de la APPO que permanecen en plantón en el Distrito Federal desde hace varios meses, el Frente Popular Francisco Villa, la Coordinadora de Trabajadores de Guerrero, el Frente Popular Revolucionario y las secciones 9, 10, 11 y 36 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación.
Fuente: Emir Olivares Alonso, La Jornada en Internet,
http://www.jornada.unam.mx/2006/11/26/index.php?section=politica&article=005n1pol 1601/2012
Funcionarios y priístas, implicados en actos violentos
Mandos de la Procuraduría General de la República (PGR) informaron que existen «amplias» posibilidades de que se concluya, en los próximos días, al menos una averiguación previa en torno a los grupos armados que han desarrollado actos de violencia en Oaxaca y que están ligados a corrientes políticas priístas locales. Asimismo, revelaron que la Procuraduría General de Justicia del Estado de Oaxaca (PGJEO) se resiste a entregar el resultado de sus investigaciones sobre el homicidio de Bradley Will, periodista estadunidense que fue abatido el 28 de octubre, durante un enfrentamiento entre militantes priístas y miembros de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO). De acuerdo con las fuentes consultadas, la PGR realiza investigaciones que involucran a algunos funcionarios del gobierno de Ulises Ruiz, por delitos cometidos durante la campaña electoral en la cual el mandatario oaxaqueño resultó triunfador, así como otros ilícitos que han sido cometidos en los últimos meses, pero que no fueron investigados por la procuraduría local. Lo anterior forma parte del seguimiento que se dio como parte de las mesas de negociación entre el gobierno de Oaxaca, la APPO y la Secretaría de Gobernación; sin embargo, el curso de las indagatorias no ha sido rápido, pero, de acuerdo con los entrevistados, existe un avance significativo que pudiera concretarse «tal vez antes de que concluya la presente administración». En las investigaciones que realiza la PGR no se encuentra implicado el mandatario oaxaqueño, pero sí «algunos de sus colaboradores y líderes priístas locales», señalaron las fuentes. Por otra parte, la Fiscalía Especial para Agresiones contra Periodistas, que dirige David Vega Vera, no ha recibido la averiguación previa que la PGJEO inició con motivo del homicidio del periodista de Indymedia, Bradley Will. «Hemos encontrado resistencia de las autoridades de Oaxaca, y aunque el asunto está muy manoseado, ni siquiera se ha tenido acceso a los peritajes realizados en torno al homicidio», señalaron los entrevistados. De acuerdo con la información obtenida, la PGJEO solicitó un plazo de 15 días para enviar a la PGR el expediente, «pues realizarán nuevas diligencias para concluir sus indagatorias», indicaron los informantes. Hasta el momento han surgido versiones contradictorias en cuanto al número de disparos que hicieron blanco en el cuerpo del periodista, ya que inicialmente, y de acuerdo con los testimonios de quienes lo auxiliaron en los primeros momentos de la balacera, el informador sólo presentaba un tiro, mientras que la procuraduría local aseguró que fueron dos, y abrió una línea de investigación en la que se presume que fueron integrantes de la APPO (los mismos que trataron de salvar su vida) los que le dispararon con la intención de «internacionalizar» el conflicto que vive la entidad oaxaqueña desde hace seis meses.
Fuente: Gustavo Castillo García, La Jornada en Internet,
http://www.jornada.unam.mx/2006/11/26/index.php?section=politica&article=005n2pol 16/01/2012
Esto se está normalizando, señala Ruiz rodeado de policías y priístas
No cesaban de volar los helicópteros de la policía estatal y de la Policía Federal Preventiva (PFP); en tierra, los rondines de las corporaciones oaxaqueña y federal en calles céntricas fue el entorno en que el gobernador, Ulises Ruiz volvió al centro histórico para sugerir: «esto se está normalizando…» Desde temprano cuadrillas municipales y estatales se afanaron en limpiar los estragos de la batalla para que Ruiz sólo recorriera los edificios que fueron incendiados sin las muestras de la refriega. El sitio donde hasta ayer permanecía el campamento de la Asamblea Popular de Pueblos de Oaxaca (APPO) fue el escenario que el gobernador usó para proclamar que no habrá perdón; que se irá tras los «delincuentes» que provocaron los «disturbios» y hasta para anunciar, engallado por el cerco policiaco, «vamos a levantar la barricada de Cinco Señores».
Irá por todos
Ruiz ocupó ese espacio para dar su parte de detenidos: 160 que, dijo, serán consignados bajo la premisa de aplicar «todo el peso de la ley». No sólo eso, anticipó que van a ir por todos los que participaron en los hechos violentos, en su mayoría, dijo en afán descalificatorio de la movilización, «son atencos, cegeacheros y panchos villa«. Contrariamente a la versión del gobernador ofrecida la víspera sobre la ausencia de heridos, la Cruz Roja reportó 53 atenciones que requirieron hospitalización y, un vez atendidos, salieron. Decenas más, atendidos en siete puntos del centro de la ciudad, en su mayoría por irritación en los ojos y por afecciones en vías respiratorios producto de los gases lanzados por la PFP. Reportes extraoficiales daban cuenta de al menos 10 personas hospitalizadas en clínicas del IMSS por heridas de bala. Los informes de daños materiales oficiales no precisaron el número de inmuebles afectados; la Dirección de Tránsito del estado reportó casi 40 automóviles incendiados. Desde el púlpito, el arzobispo José Luis Chávez Botello advirtió que «es urgente establecer nuevas y mejores relaciones de los gobernantes con cada uno de los sectores y con toda la sociedad. No olvidemos que a todos, pero especialmente a quienes están investidos de responsabilidad política, jurídica y profesional, corresponde ser testigos de una convivencia digna del hombre». Meses sin pararse en el corazón de la capital oaxaqueña y hoy lo hizo como si fuera un candidato. Arropado por sus huestes priístas que lo vitorearon pero no le quitaron el semblante preocupado, descompuesto aún más por los estornudos causados por los gases que la víspera fueron lanzados masivamente durante la intensa refriega entre la PFP y la APPO. Muy de mañana los rondines de la policía estatal comenzaron para no detenerse en casi todo el día. La PFP se replegó de nuevo a salvaguardar el centro histórico y sólo ofrecer «apoyo coordinado» a las policías estatal y municipales cuando lo requieran. Así, se presentaron en el sector Reforma, donde se reportó un incendio provocado según mandos policiacos «por dos encapuchados que amarraron al vigilante de las oficinas». Quien también se apersonó en los edificios incendiados fue la procuradora estatal, Lizbeth Caña Cadesa, donde los peritos de la dependencia levantaban pruebas de los sucesos. Caña dijo que 40 agentes del Ministerio Público que conforman el área del centro histórico de la ciudad estaban integrando las averiguaciones previas relativas a los incendios. Según el gobernador, entre los inmuebles afectados se encuentran las sedes del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) local, la Secretaría de Turismo, el teatro Juárez y la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles de Oaxaca. En el recorrido una cauda de priístas combinaban consignas por la permanencia del gobernador con los consabidos «Muerte a la APPO» y «Fuera PRD». Durante casi hora y media verificó que la vida en el estado «vuelve a normalidad», dijo, flanqueado por el líder del Congreso, Bulmaro Rito Salinas, y el presidente del TSJ, Hector Anuar Mafud, quien señaló que ardieron 6 mil expedientes en los hechos del sábado. Sólo los que corresponden a los juzgados penales podrían recuperarse, no así en los casos de los procesos civiles. Los gritos de 50 priístas lo arroparon en su recorrido por las zonas afectadas, pero Ruiz no pudo evitar osadas manifestaciones de repudio. De entre su séquito surgió una mujer que le soltó: «Ulises, ya renuncia, queremos paz» y pasos adelante otra que le exigió «No a la amnistía». Esta última parece ser la línea que seguirá el gobernador, según anuncio tras referirse a las detenciones de la víspera: «vamos a seguir avanzando hoy contra quienes cometieron actos vandálicos; que paguen, vamos a defender las instituciones. Es una ciudad que ya se está normalizando, estos actos vandálicos son precisamente eso, que ante la falta de convocatoria, se recurre a ello». Se habla de que hubo torturas en las detenciones se le planteó. No, de ninguna manera, pero de cualquier forma ahí están las instancias legales. Ruiz aseveró que hubo varios extranjeros en la movilización y que buena parte de los detenidos provienen de la capital del país y el estado de México. Como colofón del recorrido, en uno de los parques cercanos a Santo Domingo, Ruiz atendió por teléfono a una entrevista radiofónica, en la que insistió en que «el conflicto se está superando». Los recorridos policiacos continuaron todo el domingo, a la víspera de que, como anunció la APPO, hoy busque reinstalar el plantón en la plaza Santo Domingo.
Fuente: Alonso Urrutia, Octavio Vélez Ascencio, La jornada en Internet,
http://www.jornada.unam.mx/2006/11/27/index.php?section=politica&article=003n1pol 16/01/2012
Pese a la represión, la lucha se mantiene: APPO
Tras los enfrentamientos del sábado contra la Policía Federal Preventiva (PFP), que dejaron más de 100 detenidos, la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) anunció que este lunes reinstalará su campamento en el atrio del convento de Santo Domingo, del que fue desalojada. Por la noche, desconocidos balearon e incendiaron una oficina de Flavio Sosa, líder de la asamblea. En tanto, el gobierno de Oaxaca dijo que 149 personas fueron puestas a disposición de la Procuraduría General de Justicia local debido a los enfrentamientos, y recluidas en el Cereso femenil de Tlacolula de Matamoros y de Miahuatlán de Porfirio Díaz, quienes según sus defensores no pudieron ser visitadas este domingo. Florentino López Martínez, vocero de la APPO, ofreció una conferencia de prensa afuera del Centro Diocesano de Pastoral Social de la Arquidiócesis de Oaxaca, donde miembros de la agrupación fueron albergados la noche del sábado a fin de evitar más detenciones. Anunció que a las 8 horas de este lunes se reinstalará el campamento en el atrio del templo de Santo Domingo, destruido durante la reyerta, pues no cesarán en su lucha por la «caída» del gobernador Ulises Ruiz. «La lucha del pueblo oaxaqueño por la caída de Ruiz no ha terminado, pese a la sangrienta represión», afirmó el vocero, quien, junto con otros consejeros estatales, atribuyó la responsabilidad del enfrentamiento a las fuerzas federales. «Se apostaron (los agentes) en los techos de (casas y edificios) del centro, en muchos casos sin permiso de los propietarios, para arrojar piedras, canicas y gases lacrimógenos y provocar la agresión», sostuvo. Además, dijo, agentes federales, policías locales y sicarios «hicieron disparos de arma de fuego» contra los simpatizantes de la APPO, «resultando varios heridos». Reportó que los choques dejaron «165 presos políticos, decenas de desaparecidos, centenares de heridos y lesionados, así como varios muertos», hasta ahora no confirmados. Deslindó a la alianza que representa de la quema de edificios públicos y establecimientos comerciales. «No hubo ninguna orientación ni decisión (en ese sentido) porque la lucha del pueblo y la APPO es civil y pacífica», afirmó. Denunció que otros portavoces, César Mateo Benítez y Jorge Sosa Campos, primo éste de Flavio Sosa Villavicencio, fueron sacados del penal de Miahuatlán y conducidos con rumbo desconocido a bordo de un helicóptero de la PFP. Durante la rueda de prensa, un supuesto agente de inteligencia fue descubierto y sometido por miembros del equipo de seguridad de la APPO cuando hablaba en un teléfono celular para presuntamente reportar la presencia de los consejeros. El hombre, quien se identificó como Oscar Ruiz Artega, dijo ser especialista en estudios poblacionales y reportero del diario Gaceta de Morelos. Su acompañante, quien según el detenido se llama Daniel Santos y es fotógrafo de ese medio, escapó tras ser sorprendido haciendo anotaciones. Mientras, el gobierno estatal informó que la PFP puso a disposición de la Procuraduría General de Justicia del Estado a 149 detenidos, entre ellos maestros y universitarios, como presuntos responsables de delitos como ataques a las vías de comunicación, robo con violencia, asociación delictuosa, sedición y lesiones. De ellos, 93 fueron internados en el reclusorio femenil de Tlacolula de Matamoros y el resto en el penal de mediana seguridad de Miahuatlán de Porfirio Díaz. Entre estos, se encuentra el periodista de Indymedia, Juan de Dios Gómez Ramírez. Aseguró que la autoridad hasta ahora desconoce si hubo muertos en los choques del sábado, según la información proporcionada por las agencias del Ministerio Público y recorridos por los hospitales. Por el contrario, Yésica Sánchez Maya, presidenta de la filial en Oaxaca de la Liga Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos, no descartó que existan personas fallecidas, luego de presentar cápsulas de gas lacrimógeno y cartuchos percutidos de calibre nueve milímetros y 38 súper, recogidos tras los enfrentamientos. Adelfo Regino Montes, abogado y miembro de la Comisión de Seguimiento del Congreso Nacional Indígena, denunció que los 56 recluidos en el penal de Miahuatlán de Porfirio Díaz no pudieron ser visitados este domingo por sus familiares ni por su defensa jurídica, por orden del director, Juan Carreño. Por la noche, personas desconocidas que viajaban en un Volkswagen Pointer balearon la parroquia de Los Siete Príncipes, cercana a la Plaza de la Constitución, cuando el sacerdote Carlos Franco Pérez Méndez empezaba una misa. Una bala se impactó en la camioneta del cura, Ford Explorer, que se encontraba en la calle. Pérez Méndez instaló con seglares un puesto de socorro para atender a los simpatizantes de la APPO. Casi a las 21:30 horas fueron incendiadas las oficinas de Nueva Izquierda de Oaxaca, organización civil que dirige Flavio Sosa. Allí se encontraban 12 personas de San Lucas Zoquiapan, que se albergaron allí la noche del sábado para evitar ser detenidas. Según testigos, los agresores llegaron en una camioneta pick-up gris, balearon el inmueble y con el vehículo derribaron la puerta principal, rociaron gasolina y le prendieron fuego. Once personas escaparon por la azotea, pero otra, Francisco Ortega Hernández, no aparece.
Fuente: Octavio Vélez, Alonso Urrutia, La Jornada en Internet,
http://www.jornada.unam.mx/2006/11/27/index.php?section=politica&article=005n1pol 16/01/2012
Necesario, «aplicar la ley con todas sus consecuencias»: SG
La Secretaría de Gobernación (SG) advirtió ayer que los hechos violentos ocurridos el sábado pasado en la capital de Oaxaca «ameritan la aplicación estricta de la ley, con todas sus consecuencias» y, por tanto, no puede «haber consideraciones de ningún tipo». Después de manifestar su condena a la violencia en todas sus formas, «y venga de donde venga», hizo un «llamado urgente» a todos los sectores de la entidad, «especialmente a las partes en conflicto, con el fin de que aprovechen todas las vías legales e institucionales para resolver la problemática que ha tenido ya un altísimo costo para la sociedad oaxaqueña». También convocó a quienes buscan, «de manera genuina», el cambio en el estado, pero «evitando injerencias externas movidas por intereses muy distintos a los de la población oaxaqueña». A continuación el texto íntegro, del comunicado número 355/06, emitido ayer por la dependencia:
«Ante los lamentables acontecimientos ocurridos ayer (sábado) en la ciudad de Oaxaca, la Secretaría de Gobernación manifiesta lo siguiente:
«1. La violencia siempre será condenable en todas sus formas y venga de donde venga.
«2. En todos los casos, la violencia deslegitima cualquier causa, por más positiva que esta pudiera ser, sobre todo en un estado democrático como el nuestro, en el que existen los cauces institucionales para atender y resolver cualquier problema o diferendo que se suscite.
«3. La Secretaría de Gobernación hace un llamado urgente a todos los sectores de Oaxaca, especialmente a las partes en conflicto con el fin de que aprovechen todas la vías legales e institucionales para resolver la problemática que ha tenido ya un altísimo costo para la sociedad oaxaqueña.
«4. Se deben poner en juego las soluciones integrales que atiendan de raíz la conflictiva en la entidad a través de una reforma del estado efectiva, así como de una transformación política que abra las puertas a la participación de toda la sociedad.
«5. Hacemos también un llamado a quienes buscan el cambio en Oaxaca de manera genuina para propiciarlo a la brevedad posible, evitando injerencias externas movidas por intereses muy distintos a los de la población oaxaqueña.
«6. La SG quiere dejar en claro además que los hechos ocurridos ayer (sábado) ameritan la aplicación estricta de la ley con todas sus consecuencias. En favor de la seguridad de la población no pueden (sic) haber consideraciones de ningún tipo.»
Fuente: Alma E. Muñoz, La Jornada en Internet,
http://www.jornada.unam.mx/2006/11/27/index.php?section=politica&article=005n3pol 16/01/2012