Al grito de «ahora si les vamos a partir la madre, cabrones», policías estatales vestidos de civil y porros ligados a la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), rescataron ayer a sangre y fuego al gobernador Ulises Ruiz Ortiz cuando se encontraba en el restaurante Los Cántaros, del hotel Camino Real. En la acción los agresores dispararon en repetidas ocasiones sus armas de fuego, logrando herir a dos personas, y con tubos lesionaron a profesores de la sección XXII del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y la Asamblea Popular del Pueblo de Oaxaca (APPO).
De acuerdo a la versión de los agredidos aproximadamente a las 14:30 horas Ruiz Ortiz se encontraba en el interior del ex Convento de Santa Catalina de Siena, después de realizar una breve visita al Paseo Juárez, El Llano, por lo que se trasladaron al lugar para lanzar consignas y exigirle que renuncie a la gubernatura. «Nosotros llegamos a la esquina de Manuel Bravo con Reforma para resguardar la puerta de servicio del hotel, sin embargo apenas comenzamos a corear nuestras consignas cuando un grupo de policías vestidos de civil al mando de Aristeo López Martínez, (coordinador de Seguridad Pública Municipal) y cholos armados con tubos, palos y pistolas bajaron como si vinieran de El Llano y nos comenzaron a insultar», señaló una maestra integrante de la APPO.
Los policías dispararon sus armas para impedir que se acercaran, «mientras los cholos nos correteaban con tubos y palos». En el lugar fueron heridos Juan Martínez Mena, de 43 años, con una herida de bala en el codo izquierdo; Ángel Juárez García, de 52 años, con diversas contusiones en la cabeza y el albañil Martín Ortiz González, golpeado a tubazos en la espalda. Los dos últimos fueron víctimas de los porros y guaruras del gobernador cuando se los encontraron a su paso. «Los cholos tienen tomado el periódico Noticias ellos son los que se empezaron a juntar y se vinieron para acá, hubo personas que los vieron que se están reuniendo ahí, son gente del gobierno que los utiliza para esto».
En la esquina de Manuel Bravo y Reforma una profesora con los brazos y el rostro hinchado, explicó que los cholos no respetaron su condición de mujer. Narró la forma en que la derribaron y golpearon con saña. Ante la agresión los integrantes de la APPO bloquearon las calles adyacentes al hotel y pintaron consignas en el inmueble, como: «ricos cómplices de los asesinos de URO», «Ulises fuera de Oaxaca», «hoteleros cómplices de URO» y «este ex convento es del pueblo».
Fuente: Luis Ignacio Velásquez, NOTICIAS, 25 de septiembre de 2006. Núm. 10680