HUAJUAPAN DE LEON, Oax.-Mientras en la ciudad de Oaxaca la Asamblea Estatal iba a sesionar para acordar si la jornada de lucha seguirá en forma representativa o masiva hasta la caída del gobernador Ulises Ruiz Ortiz conforme a los resultados de la ronda de asambleas delegacionales de información y consulta, la «Marcha Caminata por la Dignidad del Pueblo de Oaxaca, 14 de Junio No se Olvida» del movimiento magisterial y popular hizo ayer su propia deliberación y determinó que independientemente de la decisión, llegará a la ciudad de México a plantarse en las afueras del Senado de la República para demandar la desaparición de poderes.
Los aproximadamente cinco mil participantes, la mitad trabajadores de la educación, hicieron un alto en el camino en inmediaciones de la comunidad de Santa María Tutla, durante su travesía que inició por la mañana en Tamazulapan del Progreso, y a pregunta expresa de uno de los coordinadores de la protesta, Omar Olivera, aprobaron a mano alzada una declaración política dirigida a la Asamblea Estatal del movimiento magisterial y a la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), donde hacen saber su resolución de seguir hasta la destitución o dimisión de Ruiz Ortiz. Incluso, mandó a una comisión a la capital para que acudiera a la Asamblea Estatal y presentará la conclusión.
En el documento, el contingente participante subrayó que «nadie puede negar el impacto político que ha tenido nuestra marcha caminata, (pues) sacudió a la clase política nacional, esa que se ha negado a darle una respuesta a nuestra justa demanda: la desaparición de poderes en el estado. Es claro su miedo, (ya que) la rebeldía se convierte en ejemplo y saben que nuestra paso por Puebla, Morelos y el Estado de México, hasta arribar a las puertas del Senado de la República, traerá la solidaridad del pueblo de México hacia nuestro movimiento y será un claro ejemplo de resistencia, dignidad e independencia». Además, requirió al magisterio oaxaqueño y a la alianza de organizaciones trasladar un «fuerte contingente» al Distrito Federal «para preparar el magno recibimiento que ya están trabajando diferentes organizaciones, sindicatos, estudiantes, amas de casa, niños, y hombres y mujeres» oriundos de Oaxaca radicados en el Valle de México.
La decisión, como era de esperarse, alentó y reanimó a los «marchantes» que con más energía afrontó la jornada de 41 kilómetros por un serpenteante y sinuoso trazo sobre la Carretera Internacional 125 «Cristóbal Colón» rumbo a esta municipalidad, sobre todo por ser esta parte de la región Mixteca, la cuna del Consejo Central de Lucha (CCL), donde se agrupa la disidencia, a la que han calificado de progubernamental. Pero, también por ser el último punto en el territorio oaxaqueño de esta expedición. Consignas tras consignas, sobre todo las características de esta lucha «¡Ya cayó, ya cayó, Ulises, ya cayó!» y «¡Esta marcha va a llegar al Distrito Federal!», además de la famosa ola del Mundial de México 86 y el movimiento cadencioso de sombreros y gorras al ritmo de la melancólica Canción Mixteca, compuesta por José López Alavéz, originario de este municipio. Como en las jornadas anteriores, no faltó el baile en la improvisada pista con rítmicas cumbias y charangas.
La solidaridad y el respaldo popular no se hizo esperar pues cientos de personas de las comunidades que encontró la columna a su paso, se apostaron en los lados de la carretera para ofrecer agua, fruta, comida, suero, toallas femeninas —que se utilizan como plantillas en los zapatos— y sombreros de palma, elaborados por estas tierras, a pesar de las versiones inverosímiles difundidas por las estaciones de radio comerciales de que los participantes venían saqueando tiendas, pues en el trayecto no existen comercios más que aridez. «Aunque sea arrastrando los pies voy a terminar la marcha (en la Ciudad de México), pues no podemos defraudar al pueblo», dijo la maestra Etelvina Morales, de más de 60 años de edad, una de las abanderadas que cumple su tercera movilización magisterial, y ahora popular, al Distrito Federal.
Sin embargo, por lo menos medio centenar de «marchantes» pagaron caro el reto y debieron unos ser atendidos por insolación ante el sofocante calor que se sintió y otros por ampollas y calambres en las piernas, por el largo trayecto. En Corral de Piedra, pueblo situado a unos 10 kilómetros de esta ciudad, la marcha caminata se detuvo a las 16:02 horas para la comida ofrecida por el sector Huajuapan del magisterio oaxaqueño. Después de una hora de descanso se reinició la protesta rumbo a esta ciudad. Aunque antes hubo una parada en Vista Hermosa, una comunidad ubicada a unos tres kilómetros, para «saludar» al ex dirigente magisterial, Joaquín Echeverría Lara, ahora uno de los líderes del CCL. «¡Esta marcha le duele, le duele al CCL!» y «¡Sección 22, sólo hay una, no hay dos!», corearon repetidamente.
El agente municipal, José Abel Martínez Ramírez recibió a los caminantes y destacó que la lucha del movimiento magisterial y popular «será para el bien de todos». El director de la Escuela Secundaria Técnica 189, Jaime Rosas Chávez, dijo que la presencia del CCL en la institución «es mínima». «Apenas son cuatro (entre ellos, Echeverría)», señaló. Casi a las 20:00 horas, la columna humana empezó a entrar a esta municipalidad entre luces y sombras porque por un lado, cientos de personas salieron a recibir a los marchistas y por otro, con un comercio casi cerrado en su totalidad, ante las versiones difundidas por la radio, que según dicen los habitantes salieron del presidente municipal, el panista Procopio Martínez Ramírez. A su arribo, hubo un mitin frente al Palacio Municipal, que se encuentra «tomado» por militantes de la APPO desde hace más de dos meses.
Desde aquí también mandaron un saludo a Ruiz Ortiz, quien en entrevistas ofrecidas a la radio y televisión en la Ciudad de México ha dicho que en la movilización participan no más de 300 personas. «¡No somos unos, no somos cien, pinche gobierno, cuéntanos bien!», corearon. También, enviaron sus cortesías a Mario Marín, el «góber precioso» de Puebla, estado al que empezarán a cruzar este miércoles, debido a sus amenazas de no permitir su paso. «A pesar de que tenga esas intenciones, no lo vamos a permitir porque la Constitución protege el derecho de libre tránsito y manifestación», afirmó Rogelio Vargas Garfías, uno de los dirigentes históricos del movimiento magisterial. Hoy, está previsto el trayecto de esta ciudad a Acatlán de Osorio, Puebla, de unos 35 kilómetros.
Fuente: NOTICIAS, 16A, Octavio Vélez Ascencio, miércoles 27 de septiembre de 2006